BLOG DE TEOLOGIA
  • Blog
  • Escritos de Teólogos
    • + Mons. Romero
    • Leonardo Boff
    • David Guadalupe EJ
    • Jose Maria Castillo
    • José Arregui
    • Felix Struik OP
    • José Antonio Pagola
    • Sor Lucia Caram OP
    • Hans Kung
    • Jesus Bastante
  • Poemas
  • Preguntas
  • Envía tu escrito
  • Información
    • Contactenos
    • Centro Humanístico
    • Términos y Condiciones de Uso
    • Política de Privacidad
    • Derechos de Autor
  

Tomar distancia de la mente por: Ima Sanchís

8/23/2018

0 Comentarios

 
Tengo 54 años. Soy de Sabadell. Divorciada, tengo dos hijos, Ingrid (23) y Éric (20). Soy profesora titular de Psicología de la UAB. No creo en la actual democracia, el voto es demasiado manipulable. Abogo por un comité de sabios. Creo que hay algo más que nuestro limitado cerebro no alcanza a comprender.
Jenny y su mono
Locuaz y cálida, sabe explicarse con sencillez, con ejemplos cotidianos, por eso ha inventado un personaje que define nuestros pensamientos incontrolados artífices de nuestras emociones y que son en definitiva los que controlan nuestra vida. Ha dotado de personalidad a ese loco parloteo, se trata de un pequeño mono que salta de rama en rama, de pensamiento en pensamiento, y que lleva con ella a todas partes, porque sabe que ni siquiera los psicólogos se libran de él, así que hay que observarlo de cerca y sobre todo creerle poco. Al convertir la mente en un monito de peluche consigue que no sea el enemigo invencible sino un aliado que hay que domesticar. Lo explica en su último libro, Mi mente sin mí (Aguilar).
¿Somos prisioneros de nuestra propia mente?
Sí, entre la realidad y nosotros se interponen los pensamientos. Ellos condicionan nuestro estado de ánimo. Por muy perfecto que sea el entorno, si tú piensas que es malo, es malo.
Ya.
La mente es como un mono loco que va de rama en rama, de pensamiento en pensamiento, sin ton ni son, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos.
Tenemos pensamientos absurdos.
A veces el mono nos dice cosas raras, sin sentido. Puedes estar esperando el metro y que te pase por la cabeza “¿qué pasaría si me tiro?”.
Pensamientos inconfesables.
No es que estés deprimido, simplemente es un pensamiento que cruza tu cerebro sin más. Hay que saber que eso le pasa a todo el mundo.
Es tranquilizador.
Pero puedes percibir que hay una parte de ti que no es mente, el yo observador, y es lo que debemos potenciar. Hay que estar atento. Tenga, quiero regalarle esto.
Una chapa con un mono.
Sí, y con una frase crucial: “Obsérvame mucho y créeme poco”. No se crea al mono.
Si quitamos la mente, ¿qué nos queda?
Se trata de distanciarse de la mente que juzga, que critica, que nos menosprecia, que nos desconcentra. A la mente hay que utilizarla.
¿El mono miente?
Estamos llenos de emociones, y el mono no es lúcido, nos hace tomar decisiones en caliente, justificar actitudes erróneas.
¿Los pensamientos son nuestro peor enemigo?
Esa frase de Buda a mí no me convence, porque sí tú crees que tus pensamientos son tu peor enemigo, te sentirás culpable, te enfadarás contigo mismo. Por eso yo utilizo un monito travieso, porque si vemos la mente como algo tierno podremos educarla y guiarla con más facilidad.
Con dulzura.
Tampoco me gusta la expresión “controlar la mente”. La mente no es un Excel, mejor observarla, decidir creerla más o menos, alimentarla de manera positiva… generar autocompasión.
¿Usted sabe hacerlo?
No hace mucho me hundí, no le encontraba sentido a nada. Un día llorando desconsolada me repetí: “Todo esto te lo estás haciendo tú”, y después de mucho insistir mi mente cambió. Lo que nos repetimos tiene mucho poder.
¿Y ya está? Mi mono no se lo cree.
Mejoré, pero cuando el mono volvía a susurrarme pensamientos torturantes como “todo va a salir mal”, me tambaleaba. A la mente le encanta hacer suposiciones, y la mayoría son falsas. Debemos suavizar nuestra rigidez mental si queremos ser felices. Pero la vida está llena de trampas.
Nos pone a prueba con insistencia.
Tú puedes acabar de meditar, sentirte en paz, recibir un e-mail incendiario y se acabó la paz.
Sí, y encima te sientes imbécil.
Necesitamos apuntalarnos, y yo lo hago dándole una frase al mono que le pido que me repita sin descanso, algo que le encanta.
Póngame otro ejemplo.
Quedé con una amiga que me había ofendido y temí no ser capaz de mantener la paz, así que le di un mantra al mono: “Escúchala, respira y calla”. El mono me traicionó y me puse a la defensiva, pero me agarré al mantra, me centré y no caí en la trampa. Hay que mantener el centro.
Entonces tenemos que luchar contra nuestra propia naturaleza.
El otro día vi un chiste: caminan en fila el Homo sapiens, el neandertal, el erectus y el australopithecus. El Homo sapiens se gira y les dice a los demás: “Chicos, volvamos a empezar que nos hemos equivocado en todo”.
Un chiste muy lúcido.
Todos estamos locos, la cuestión es el grado de cada cual. No estamos relajados, decimos “descansa en paz” cuando la gente se muere. El estado basal debería ser estar tranquilos, y no lo estamos. Pero la palabra luchar tampoco me gusta, hay que observar mucho y saber adónde nos está llevando el mono. Estamos despistados.
Si no somos la mente, ¿qué somos?
Lo que quedas cuando sacas todo lo demás, la conciencia de ser. Mucha gente, y eso lo está estudiando la ciencia, cuando tiene un accidente puede verse desde fuera, dando las vueltas de campana. El cerebro siempre nos da una perspectiva, pero puede darnos otra.
¿Qué pasa con el mono cuando dormimos?
Se quita el gorro de la lógica y sigue hablándonos a través de los sueños. Nuestros pensamientos son repetitivos, los de hoy y los de ayer se parecen mucho.
Somos obsesivos.
Sí, obsérvese y verá que tiene muy pocos pensamientos originales. En cambio, por la noche puede saltar a ideas más inconexas y crear cosas nuevas, otros puntos de vista.
¿Cómo guiar la mente en el día a día?
Aprender a nadar en un maremoto es complicado. Hay que hacer silencio y simplificar, vivir sin tanto reto ni autoexigencia, sólo así puedes observar al mono y detectar los pensamientos automáticos que nos dejan huellas emocionales. Porque también llevamos un sabio dentro.
Muy calladito.
Solemos conectar con él cuando nos hemos salvado de una gorda, pero luego volvemos a olvidarlo y a vivir con el piloto automático, por eso digo que lo único que falta en tu vida eres tú.
0 Comentarios



Deja una respuesta.

    Picture
    Ayuda al Blog que publica todos los días diferentes áreas, queremos seguir publicando

    EL BLOG

    El blog es uno dedicado al análisis en general de muchos puntos desde la ópica teológica. La meta es impulsar el estudio amplio y profundo de la fe y de la razón, siendo ambos elementos fundamentales de la vida.

    Picture
    Picture
    Picture
    Picture
    SABES QUE PUEDES HACER COMENTARIOS A LAS REFLEXIONES O ENSAYOS TEOLOGICOS QUE APARECEN EN EL BLOG, SI PUEDES INTENTALO...

    Archivos

    Febrero 2023
    Enero 2023
    Septiembre 2022
    Enero 2022
    Diciembre 2021
    Noviembre 2021
    Octubre 2021
    Septiembre 2021
    Agosto 2021
    Julio 2021
    Junio 2021
    Mayo 2021
    Abril 2021
    Marzo 2021
    Febrero 2021
    Enero 2021
    Diciembre 2020
    Noviembre 2020
    Octubre 2020
    Septiembre 2020
    Agosto 2020
    Julio 2020
    Junio 2020
    Mayo 2020
    Abril 2020
    Marzo 2020
    Febrero 2020
    Enero 2020
    Diciembre 2019
    Noviembre 2019
    Octubre 2019
    Septiembre 2019
    Agosto 2019
    Julio 2019
    Junio 2019
    Mayo 2019
    Abril 2019
    Marzo 2019
    Febrero 2019
    Enero 2019
    Diciembre 2018
    Noviembre 2018
    Octubre 2018
    Septiembre 2018
    Agosto 2018
    Julio 2018
    Junio 2018
    Mayo 2018
    Abril 2018
    Marzo 2018
    Febrero 2018
    Enero 2018
    Diciembre 2017
    Noviembre 2017
    Octubre 2017
    Septiembre 2017
    Agosto 2017
    Julio 2017
    Junio 2017
    Mayo 2017
    Abril 2017
    Marzo 2017
    Febrero 2017
    Enero 2017
    Diciembre 2016
    Noviembre 2016
    Octubre 2016
    Septiembre 2016
    Agosto 2016
    Julio 2016
    Junio 2016
    Mayo 2016
    Abril 2016
    Marzo 2016
    Febrero 2016
    Enero 2016
    Diciembre 2015
    Noviembre 2015
    Octubre 2015
    Septiembre 2015
    Agosto 2015
    Julio 2015
    Junio 2015
    Mayo 2015
    Abril 2015
    Marzo 2015
    Febrero 2015
    Enero 2015
    Diciembre 2014
    Noviembre 2014
    Octubre 2014
    Septiembre 2014
    Agosto 2014
    Julio 2014
    Junio 2014
    Mayo 2014
    Abril 2014
    Marzo 2014
    Febrero 2014
    Enero 2014
    Diciembre 2013
    Noviembre 2013
    Octubre 2013
    Septiembre 2013
    Agosto 2013
    Julio 2013
    Junio 2013
    Mayo 2013
    Abril 2013
    Marzo 2013
    Febrero 2013
    Enero 2013
    Diciembre 2012
    Noviembre 2012
    Octubre 2012
    Septiembre 2012
    Agosto 2012
    Julio 2012
    Junio 2012
    Mayo 2012
    Abril 2012
    Marzo 2012
    Febrero 2012
    Enero 2012
    Diciembre 2011
    Noviembre 2011
    Octubre 2011
    Septiembre 2011
    Agosto 2011
    Julio 2011
    Junio 2011
    Mayo 2011
    Abril 2011
    Marzo 2011
    Febrero 2011
    Enero 2011
    Diciembre 2010
    Noviembre 2010
    Octubre 2010
    Septiembre 2010
    Agosto 2010
    Julio 2010
    Junio 2010
    Mayo 2010
    Abril 2010

    Categorias

    Todo

    Canal RSS

    Picture
Centro Humanístico © Derechos Reservados 2010-2023
  • Blog
  • Escritos de Teólogos
    • + Mons. Romero
    • Leonardo Boff
    • David Guadalupe EJ
    • Jose Maria Castillo
    • José Arregui
    • Felix Struik OP
    • José Antonio Pagola
    • Sor Lucia Caram OP
    • Hans Kung
    • Jesus Bastante
  • Poemas
  • Preguntas
  • Envía tu escrito
  • Información
    • Contactenos
    • Centro Humanístico
    • Términos y Condiciones de Uso
    • Política de Privacidad
    • Derechos de Autor